Panóptica



Ayer se inauguraba en Madrid Panóptica, una exposición retrospectiva sobre la figura de Max y su obra. El montaje de la exposición, en el apropiado marco del Instituto Cervantes, es ameno y funcional, un recorrido cronológico por la carrera del autor que, afortunadamente, ofrece mucho más que originales colgados de las paredes. Quien se acerque por allí podrá ver máscaras, libros, cartas, fotos, bocetos, discos, pósteres, estatuillas y hacerse una idea no solo de la calidad y la evolución de Max como artista, sino comprobar los distintos ámbitos en los que ha venido trabajando a lo largo ya de varias décadas. Casi al salir de la muestra me di cuenta de una cosa: las primeras obras expuestas datan de 1973, el año en que nací, lo que significa que Max ha estado ahí durante toda mi vida y, en cierta manera, ha sido su cronista. Así, que pasen otros 40 años.

Y como una imagen vale más que mil palabras, aquí dejamos una galería fotográfica que cubre tan solo una pequeña parte de todo lo que la exposición ofrece al visitante. Pasen y vean.


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