El lenguaje bastardo



El tebeo es un lenguaje bastardo.
No es ni pura imagen, ni pura literatura: como la literatura, cuenta historias sirviéndose de palabras, pero ofrece además una interpretación puramente plástica de esa historia a través del dibujo. Como la pintura, ofrece una experiencia estética, pero ésta está supeditada absolutamente a la narración.
Un tebeo ofrece una experiencia de lectura que es muy particular y que no puede compararse a ninguna otra, y demanda del lector un tipo de elaboración específica. Una forma de concentración y de asimilación que no es la misma que exige la literatura o los lenguajes audiovisuales. En los buenos tebeos, la narración, y el dibujo forman un todo, una unidad indisoluble, y no puede entenderse un buen tebeo atomizando una cosa y otra. Vamos, que no hay buenos guiones mal dibujados, ni buenos dibujos para malos guiones: lo que hay son buenos tebeos, o malos tebeos.

José Luis Munuera habla sobre el cómic, su origen, sus tradiciones y sus herramientas, sus códigos y la comunicación que se establece con el lector, en el blog de Juan Díaz Canales.