Entrevista con Javier de Isusi

Javier de Isusi (Bilbao, 1972) como él mismo nos cuenta, es arquitecto casi por descarte. Cuando acaba la carrera, trabaja durante un tiempo en un estudio pero se da cuenta de que su verdadera pasión, lo que de veras le gusta es contar historias. Contarlas y dibujarlas. Y, desde luego, no se le da nada mal: finalista en 2003 en el I Concurso Europeo de Álbum de Cómic promovido por Glénat, compartiendo trabajo con el argentino Luciano Saracino; ganador del Segundo Premio del XIX Concurso de Cómic de Portugalete dos años después y Premio al Autor Revelación en 2004 en La Cárcel de Papel.
Isusi recorrió durante un año el subcontinente de América del Sur, de donde ha extraído todo el material, la magia, la ambientación, las historias y las gentes para deleitarnos con Los Viajes de Juan Sin Tierra, donde la aventura y los aventureros nos esperan en cada página.
¿Quieren saber mucho más acerca de Javier de Isusi?
Pasen y lean. Y déjense mecer por las olas, las sombras, la luna y por los personajes que nos transportan a otros lugares, que nos hacen pensar y ver más allá de lo que parece…

¡¡Muchas gracias, Javier!!

Javier_y_Vasco
Javier de Isusi y Vasco, dos viajeros


Partiendo de una base académica tan -digamos- «seria» como es la arquitectura, ¿cómo te acercas y decides dedicarte profesionalmente al mundo del cómic?

La verdad es que es una aproximación por necesidad vital. Estudié arquitectura de alguna manera porque no veía otra cosa que me gustara más, en aquella época no tenía ni idea de que lo de hacer cómics se podía estudiar y la verdad es que tampoco me atrevía a pensar que pudiera vivir de ello (¡y sigue siendo un atrevimiento pensarlo!). Luego la vida se encargó de dejarme claro que o lo intentaba o me pasaría el resto de mis días frustrado garabateando por las esquinas historias impublicables. Una vez que decidí dedicarme a esto fue como empezar otra carrera, esta vez de una manera autodidacta. Afortunadamente no empezaba de cero, la carrera de arquitectura me enseñó bastantes cosas de cómo debe uno enfrentarse a una labor creativa, así que tampoco fueron años perdidos.

A la hora de llevar a cabo tus propias historias, ¿cuáles han sido y son tus influencias a la hora de dibujar o guionizar?

A la hora de dibujar las influencias son de lo más variopintas. En general siempre me han llamado más la atención los autores de la escuela europea, especialmente los italianos (Manara, Pratt, Pazienza) y recuerdo haber sufrido una especie de shock cuando salió el primer número del Peter Pan de Loisel; pensé: “ah, pero ya hay alguien que dibuja como a mí me gustaría dibujar”. Hoy por hoy me pasa eso con Frederick Peeters.
Pero para mí más importante que el dibujo es la narración, y a la hora de narrar quien más me ha enseñado es sin duda un autor norteamericano: Will Eisner.
En los guiones para mí la referencia indiscutible es Pratt, sobre todo por su capacidad de crear ambientes y personajes.
Sin embargo a la hora de armar las historias tengo una manera propia de construirlas que no bebe de muchas influencias, más bien volvemos al tema de la arquitectura, las armo como edificios, está todo muy bien apoyado en una estructura previa (a veces hasta demasiado).

¿En la actualidad te consideras fan o seguidor de algún autor u obra en concreto?

Sí, sí, de Frederick Peeters (Lupus me ha gustado aún más que Píldoras Azules), de Alex Robinson (aún ando enganchado al Malas Ventas), de Taniguchi, de Craig Thompson, de Baudoin, de David Rubín

Por citar una fuente muy reconocible en Los Viajes de Juan Sin Tierra: ¿Hasta qué punto Corto Maltés de Hugo Pratt ha influido en tu obra o en el desarrollo de tus personajes? Está claro que te gustan esos homenajes y referencias tan claras a determinados autores y/o personajes, ¿a que se debe? ¿Necesidad, gusto, capricho?

¿Corto Maltés? Se puede decir que sin Corto Maltés no hay Vasco. Corto, como Humphrey Bogart, representa el arquetipo del aventurero desapegado al que todos nos habría gustado parecernos en algún momento. Siempre con la respuesta adecuada en la boca, con grandes amigos, las mujeres suspiran por él, un héroe que acaba salvando vidas como por rutina, sin darle importancia. A Vasco le gustaría parecerse a él y ése es su error, porque Corto es un personaje fascinante pero si te encontraras a una persona de carne y hueso como él tal vez resulte un poco patético porque es “demasiado” personaje.
En Los viajes de Juan Sin Tierra la sombra del tipo de aventurero que encarna Corto Maltés es tan fuerte que es como si fuera un personaje más de la narración, y de ahí que lo haga explícito a través de diferentes homenajes. De alguna manera es como decir: “Oye, que no es que se me escape Corto Maltés entre las rendijas de las viñetas, es que le he invitado a esta historia”
En el caso concreto de La isla de Nunca Jamás además de las referencias a Corto Maltés hay muchísimas más referencias literarias, cinematográficas y comiqueras; pero es porque uno de los puntos clave de este cómic es la frase que dice Paola: “Somos lo que nos contamos que somos”. Por eso narrativamente el libro funciona como una historia de historias en las cuales vemos cómo diferentes personajes se cuentan sus propias historias; las referencias que van apareciendo son como ventanas que se abren a otros libros o películas, a otras historias en definitiva.

La Pipa De Marcos
Portada del primer volumen de Los viajes de Juan Sin Tierra: La pipa de Marcos


¿Y cómo ha influido Regis Loisel en La Isla de Nunca Jamás?

Bueno, Loisel no ha influido mucho, más bien le hago un par de homenajes por lo que disfruté con su Peter Pan, que me parece una de las grandes obras del cómic europeo del cambio de siglo. En La Isla de Nunca Jamás el que realmente influye es J. M. Barrie, el autor de la novela Peter Pan, y no solamente por los personajes gemelos que aparecen en el cómic y en la novela: la estructura narrativa del cómic está calcada a la de la novela. No fue un capricho, fue un juego más de referencias, sólo que ésta es una referencia muy difícil de pillar, hay que conocerse muy bien el libro (y el cómic) para darse cuenta de que la secuencia de la acción del cómic es paralela a la del libro. Es lo que hizo Coppola con El Padrino III, calcó la estructura y los tiempos de El Padrino I. Por cierto que me costó bastante lograr eso, Peter Pan tiene una estructura bastante anárquica y responde a un tipo de novela fantástica sin una lógica temporal clara. Era bastante complicado pasar eso a un orden secuenciado de una historia que pasaba en pocos días y en el mundo real donde los malos no son tan rematadamente malos (bueno, o sí) como lo puede ser un Capitán Garfio.

En las contraportadas de Los Viajes de Juan Sin Tierra cuentas que viajaste por Centro y Sudamérica, ¿cómo influyó este viaje en esta serie de novelas gráficas y si estás de acuerdo con esta denominación -novela gráfica- para tu trabajo?

¡Madre mía! ¡Aquel viaje influyó TODO en Los Viajes de Juan Sin Tierra! No sólo porque mientras hice el viaje se me iba ocurriendo ya la serie, sino porque fue en ese viaje cuando decidí aparcar la arquitectura y dedicarme a lo de hacer cómics.
En cuanto a si estoy de acuerdo en denominar novela gráfica a mi trabajo, sí, porqué no. Me dan un poco igual las etiquetas, y creo que lo de novela gráfica responde más a un formato de edición (en el cual Los Viajes de Juan Sin Tierra encaja a la perfección) que a otra cosa.

¿Tenías planeado realizar una serie a partir de tus experiencias allí vividas o la idea surgió después?

La verdad es que surgió durante. El personaje de Vasco ya existía en mi cabeza y también el de Juan Sin Tierra, aunque yo antes no sabía que estos dos personajes estaban relacionados y tampoco sabía qué viajes o aventuras les habían pasado. Eso lo fui descubriendo durante el viaje. En la isla de Ometepe tuve una especie de “iluminación” y me pasé tres días escribiendo sin parar lo que fue el primer guión de La isla de Nunca Jamás y el primer boceto argumental de La pipa de Marcos.

¿Cuál es la razón para la elección de esas zonas en concreto? ¿Existe alguna razon primordial para la ambientacion en esos emplazamientos o crees que la historia podria funcionar con una localización distinta?

Mmm… no hay una razón para elegir esas zonas. O más bien, yo no las elegí, salieron así. Claro, salieron así porque fueron lugares que personalmente me tocaron mucho… Simplemente la historia transcurre en esos lugares, no me puedo imaginar otros porque entonces la historia sería forzosamente otra.
No sé, cuando haces una historia la sensación que tengo es de que te conviertes en canal de esa historia. La historia está ahí, flotando en el aire y espera encontrar un canal para salir. De pronto apareces tú y la historia te atraviesa, pasa por tu filtro personal (con tus preferencias y manías) y sale a través de tus habilidades personales. En mi caso sale convertida en cómic pero si hubiera sido… mmm, no sé, Pedro Guerra habría salido un disco. Bueno, es mi percepción personal, así es como vivo yo el proceso creativo, un poco lo que decía Miguel Ángel de que esculpir una estatua en piedra era simplemente quitar todo lo que le sobra a la estatua. La estatua ya está ahí y la habilidad del escultor es saber sacarla lo más pura posible. En mi caso siento que la historia está ahí y mi labor es ir descifrando qué es lo que pasa a continuación, así que si la historia me vino sucediendo en Chiapas y en Nicaragua… yo no podría cambiarla de lugar (lo cual no quiere decir que no podría funcionar en… Camboya por ejemplo).

Interior
Página 113 de La Isla de Nunca Jamás


¿Hasta qué punto es la serie autobiográfica? Y de ser así, ¿con qué personaje te identificas más? O lo que es lo mismo, ¿cuánto hay de Javier de Isusi en cada personaje? ¿Tienes un personaje favorito?

Ja, la pregunta del millón.
Aunque no es una serie autobiográfica, hay muchísimas cosas autobiográficas en ella. Por una parte la trama argumental de la obra es ficción pura, pero luego casi todos los detalles son reales, los personajes que aparecen están basados en personas que conocí, los decorados son reales (a nivel físico y de realidad social) y a un nivel más profundo hay un punto de Vasco en el que él y yo nos encontramos. Por supuesto yo no soy el aventurero que a Vasco le toca ser pero mentiría si dijera que Vasco y yo no tenemos nada en común.
En La pipa de Marcos yo andaba más diluido entre todos los personajes, casi todos tenían buena parte de mí y curiosamente Vasco, que en ese tomo apenas se muestra, es casi con el que menos me identifico. Pero a medida que la serie avanza se le va viendo más y en esa medida también se me verá más a mí, supongo.
En cuanto a personajes favoritos… no hombre, hay que quererlos a todos, aunque sean adoptados…
Héctor Germán. Me divierto muchísimo cada vez que sale, y Chico me produce mucha ternura.

Chico
Página de La Isla de Nunca Jamás elegida por Javier de Isusi donde aparece su Chico


Nos comentaste durante el Saló de Barcelona que esta serie de Los Viajes se compone de cuatro entregas, de las que ya han visto la luz dos de ellas, ¿tienes una planificación para todos los álbumes restantes? ¿Puedes hablarnos de los que aún faltan por salir? Y lo que los lectores están impacientes por saber… ¿Para cuándo el ansiado tercer número?

Sí, están bastante ataditos casi desde el principio. Por supuesto que yo no sé todos los detalles que van a suceder, pero a un nivel muy general sí tengo muy claro por qué fases debe pasar el viaje de Vasco y el de Juan (ya que son dos viajes diferidos en el tiempo pero paralelos de alguna manera) y cómo acaban. Luego, según se aproxima la realización de cada tomo la historia se va revelando poco a poco.
Ahora mismo he estado muy liado con la construcción de mi casa así que el tomo III está ahí en mi cabeza como una presa a punto de rebosar. Estoy a punto de ponerme a escribir el guión y me parece que voy a inundarlo todo, tengo demasiadas ideas en la cabeza. A los lectores sólo puedo pedirles paciencia… espero que para dentro de un año vea ya la luz Río Loco (ah, así se llama, y hasta ahí puedo leer).

¿Tuviste claro desde el primer momento que necesitarías cuatro entregas para desarrollar la historia o por el contrario es la evolución de la historia ha ido marcando la extensión del conjunto?

Pues… no sé muy bien porqué, pero siempre supe que serían cuatro. Cuatro cuadernos de viaje usé en aquel viaje y cuatro son las partes de las que se compone el viaje de Vasco, incluso desde el principio tengo claros sus títulos. No sé muy bien porqué, es otra de esas cosas que no puedo discutir, ni explicar, vienen así porque son así. Aún así siempre he dejado la puerta abierta a un quinto tomo a modo de epílogo, pero eso vendría aparte, no serían ya Los Viajes de Juan Sin Tierra, sería otra cosa.

Esta serie es en riguroso blanco y negro, con grandes contrastes, ¿te sientes más cómodo trabajando así y crees que es el tratamiento mas adecuado para la historia o contemplas la posibilidad de trabajar en color en un futuro, sino con ésta, tal vez con otra historia?

Hay varias razones para el empleo del blanco y negro riguroso.
Una razón es por reivindicar el blanco y negro en una época en la que todo va saturado de colores. El blanco y negro es por supuesto menos real, pero por eso tiene mucha más carga sugerente y se establece una relación más cómplice con el lector: es el lector el que decide de qué color es la camisa de Vasco. Por otra parte obligarme a mí mismo a usar el blanco y negro riguroso me parecía una buena manera de empezar (ya que esta serie es mi primera obra publicada), es como empezar por lo más básico.
Otra razón es por homenaje, a Corto Maltés y el resto de cómics de aventuras que hemos leído de pequeños (menos esos del Capitán Trueno y sus clones que iban en colorines).
Otra razón es por economía de trabajo, si ya tardo un montón en dibujar 150 páginas en blanco y negro no quiero ni pensar lo que sería en color.
Y otra razón es por economía de dinero: me publican la serie en blanco y negro, no sé si habría encontrado editor si la hubiera presentado en color (sale mucho más cara la edición).
Los Viajes de Juan Sin Tierra no me los imagino en color, pero otras historias, sí por qué no. De hecho yo ya he dibujado alguna historia corta en color y un proyecto que presentamos mi amigo Luciano Saracino y yo a Glénat iba también en colores.

Eres un autor completo, tanto el guión como el dibujo son tuyos: asi pues, ¿cuál es el proceso que sigues para elaborar tu obra?, ¿es el guión el que define el dibujo o la idea de lo que quieres dibujar lleva la historia?

Más bien lo primero. Primero hay argumento, luego hay guión, luego hay dibujo y después retoques de guión. Todo bastante metódico, es igual que cuando hacía proyectos de arquitectura, empezaba por la escala urbanística y acababa con los detalles constructivos.

¿Te planteas trabajar con otros autores tanto en tu faceta como guionista como en la de dibujante? Y si es asi, ¿en qué faceta te sentirías mas cómodo colaborando con otro autor, como guionista o como dibujante? Y puestos a elucubrar ¿Tienes alguna preferencia o algún autor con el que sentirías especial predilección por trabajar?

Sí, por supuesto, me encanta colaborar con otros autores. De hecho los primeros trabajos que hice (no publicados) yo hacía de dibujante (aunque siempre metía mano en el guión) y Luciano Saracino de guionista. Ahora mismo entre él y yo hemos hecho de guionistas para un trabajo con otros nueve dibujantes (y también he metido mano en los dibujos) que si todo sale bien saldrá publicado por Dolmen para agosto. Se llama Historias del Olvido y ha sido un gusto trabajar de nuevo con Luciano y con todos esos dibujantes (David Rubín, David Lafuente, Paco Roca, Infame&Co., Danimaiz, Manu Ortega, Alex Orbe, Abril Barrado, Raquel Alzate y Leticia Ruifernández).

¿Estás contento con la edición de Los Viajes de Juan Sin Tierra llevada a cabo por Astiberri?

Sí, sí. Mucho. Es la edición que yo soñaba.

La Isla de Nunca Jamás
Portada del segundo volumen, último publicado hasta ahora, de Los Viajes de Juan Sin Tierra: La Isla de Nunca Jamás


¿Te has sentido interesado o incluso has podido colaborar en la realización de dichas ediciones?

Hombre, la verdad es que conociendo cómo hacían las ediciones en Astiberri yo siempre he delegado en ellos todo lo que he podido. Por supuesto que en algunas cosas hay que dejar indicaciones pero… bueno, lo hacen tan bien que poca cosa he tenido que decir.

Un par -o tres- más de las habituales: ¿cómo ves el panorama del tebeo en nuestro país? ¿Cómo es comparado con Francia, donde están siendo publicados Los Viajes de Juan sin Tierra? ¿Tienes más ofertas para publicar fuera de España? (cómo, cuándo, dónde)

El panorama del tebeo en nuestro país es el que es, y no es otro; vamos que no se puede comparar con Francia pero tampoco creo que debamos quejarnos. Es un mercado raquítico, pero es que como decía Javier Olivares una vez, querer ser dibujante de cómics en España es como querer ser torero en Japón… vaya, ¡haber nacido en otro país!
Por otra parte ahora mismo se está viviendo un momento de efervescencia que yo diría es casi emocionante, con tanto autor novel saliendo por cada esquina y tanta editorial novel queriendo sacar cosas interesantes; y luego que gracias al manga y a la novela gráfica ya no es un mundo exclusivamente de hombres.
En Francia, lo que pasa es que hay una cultura del cómic que aquí no existe, lo cual quiere decir que se editan muchísimos más cómics, y que las cifras de ventas se disparan por 100… en el caso de los best-sellers. Pero son cifras un poco engañosas, los que venden mucho venden muchísimo más en Francia y te puedes encontrar uno o dos cómics en la lista de los 10 libros más vendidos del año pero esas cifras no se mantienen en todos los cómics. Hablando de cómics más minoritarios como es el caso del mío puedes encontrarte con que duplicas el número de ventas con respecto a España pero tampoco mucho más.
Ahora parece que va a salir en septiembre la versión portuguesa de La pipa de Marcos (por cierto que Portugal es un país sorprendente hablando de cómics).

Y a más largo plazo… ¿Tienes pensado algo para cuando Vasco se jubile?

¡Ay! Tengo demasiadas historias y poco tiempo para contarlas. Muchas, muchas historias, novelas gráficas y series de género fantástico, de ciencia ficción, y cuentos infantiles… pero en la vida hay que vivir además de dibujar, y eso –vivir- afortunadamente lleva más tiempo…

Mar