TNY: Ceesepe y Max

Obviamente, no todas las aportaciones de autores de cómic españoles a la cubierta de The New Yorker iban a ser tan abundantes como la de Ana Juan. Algunos han sido más efímeros, aunque tenían calidad de sobra para haber prosperado en la revista. Uno de ellos fue Ceesepe, autor que a pesar de haber realizado cómic, pronto se decantó por la ilustración. Unas ilustraciones que veíamos de vez en cuando, por ejemplo, en las portadas de El Víbora y que rebosaban de modernos y ambientes nocturnos. Preparando esta entrada hemos dado con el Flickr de Ceesepe, con muestras de su obra en distintas disciplinas y formatos. Pero a lo que íbamos. Si decíamos que Ceesepe era sinónimo de modernidad y de fiesta, su única portada para The New Yorker, de 1993, lo corroboraba.



El otro autor de cómic español que pasó casi de puntillas por la historia de las portadas del semanario neoyorquino fue Max. De Max no hace falta decir nada, su extraordinario trabajo en el mundo del cómic y de la ilustración hablan por sí solos. Max afirma que, aunque solo en dos ocasiones ha podido estampar su firma en la portada de la revista, ha realizado muchas otras cubiertas que no han sido publicadas. También declara que la del número navideño de 1995 es una de sus portadas favoritas, y aquí narra alguna anécdota al respecto. Su otra portada publicada es de 1997.