La Tragedia de P (Rumiko Takahashi). Glénat, 2006. Rústica con obrecubierta. B/N. 208 Páginas. 10,00 €
La autora de este manga de tomo único es Rumiko Takahashi, muy conocida -incluso por los no seguidores de este tipo de tebeos- por ser la creadora de series como Ranma 1/2, Innu -Yasha o Maison Ikkoku, que han llegado a marcar un antes y un después en este género, en las que el humor y el amor se mezclan a partes iguales, partiendo de situaciones en las que se combinan también y con la misma facilidad, lo cotidiano más común con las situaciones más estrambóticas.
En «La Tragedia de P», nos encontramos con una serie de relatos cortos, en los que destaca el dibujo ya típico y absolutamente reconocible de esta autora: los rostros redondeados, serios y dulces, los personajes que transimiten emociones con el pudor y el recato que atribuímos al japonés típico, o esos gestos desmesurados cuando sucede algo que se considera inconcebible, los ojos «occidentalizados» y la meticulosidad exquisita por todos y cada uno de los detalles: en la vestimenta, en la posición de las manos, la arquitectura exterior e interior, los paisajes y las ya más que famosas y marcadísimas líneas cinéticas.
La historia que da nombre a este tomo, «La tragedia de P», gira en torno a unos inquilinos que viven en un bloque de viviendas en el que está prohibido terminantemente tener animales, y las relaciones que se establecen entre los diferentes propietarios, sobre todo, cuando una mujer en la Asociación de Vecinos está dispuesta a hacer cumplir la norma a rajatabla, y otros vecinos que por distintas causas violan dicha regla.
«El Negocio del Romance» es el segundo relato o cómo seguir manteniendo a flote un restaurante especializado en celebrar ceremonias y convites de bodas, en el que siempre hay algo más de lo que aparece a primera vista.
En «El Basurero de Casa» contemplamos las extrañas relaciones que se establecen entre un trabajador medio, con espectativas de promocionar en su empresa, y su jefe, cuando éste se muda a la casa de al lado.
Esa relación entre realidad con un punto de extrañeza queda bien patente en «En las macetas»: la historia de una mujer, esposa y, como no, nuera, y su vecina, que se queda al cargo de sus plantas y descubre algo insospechado en una de ellas.
«Cien añor de Amor»: por supuesto, el amor, en todas sus formas y maneras. Aquí, traspasando las fronteras del espacio y el tiempo para intentar verse cumplido, aunque sea de modo casi inverosimil.
«Felicidad, Talla Grande»… o como un duende o espectro tradicional, que es visto por la esposa en un tamaño descomunal, ayuda a una familia a encauzar el camino hacia sus sueños.
Todos estos relatos conforman este tomo y puede ser una buena forma de iniciarse para alguien que no haya leído nada de Rumiko Takahashi, que fue alumna destacada de Kazuo Koike (escritor de El Lobo Solitario y su Cachorro y Asa el ejecutor, por ejemplo), de «hacerse» con el modo de lectura oriental y de disfrutarlo, pues la edición de Glènat está muy cuidada (la foto que aparece es de la edición francesa, aquí el tomo está en blanco y negro). Después de haber leído alguna de sus otras obras, esperaba algo más, pero resulta por debajo de las espectativas que me había creado. Tal vez, Rumiko Takahashi sea el tipo de autora que gana en las obras más complejas o con historias más largas que le permitan desarrollar más los personajes, y enredar las tramas maravillosamente, pero lo cierto es que me he quedado con ganas de más, que me ha sabido a poco. Por ejemplo, la trama de «El negocio del romance», deja el final abierto, dispuesto a posibles interpretaciones, como si fuese un episodio piloto de una serie mayor y más compleja. El resto sí son autoconclusivas, pero queda la sensación de que puede haber mucho más en el tintero, que hay otra entrega pendiente en la que «ese» personaje, que apenas se ha dejado ver, puede tener un protagonismo especial: esta autora es capaz de mucho más … y mejor.
Interesante, pero no resiste una purga por motivos de espacio